
Tipos de demandas por responsabilidad del producto
Las demandas por responsabilidad del producto generalmente se dividen en cuatro categorías amplias: diseño defectuoso, defecto de fabricación, falta de advertencia adecuada o defecto de marketing.
- Diseño defectuoso. Un producto con un diseño defectuoso está diseñado de una manera que lo hace peligroso incluso cuando se usa correctamente. Por ejemplo, un automóvil que tiende a volcarse al girar en curvas cerradas es inseguro sin importar quién lo conduzca.
- Defecto de fabricación. Algunos productos son generalmente seguros de usar, pero un error en el proceso de fabricación crea una pequeña cantidad de productos que son diferentes de los demás en la estantería. Por ejemplo, un columpio construido con una cadena agrietada podría dañar a un niño, mientras que los columpios que fueron fabricados correctamente no tienen problemas de seguridad. El defecto de fabricación que causó la cadena agrietada es el centro de la demanda por responsabilidad del producto.
- Falta de advertencia adecuada. Los consumidores compraron un artículo y no fueron adecuadamente advertidos sobre cómo usarlo de manera segura. Por ejemplo, los medicamentos de venta libre deben tener advertencias sobre su uso seguro. Una marca de jarabe para la tos que no advierte al usuario que puede causar complicaciones cardíacas peligrosas cuando se toma con acetaminofén sería inaceptable.
- Defecto de marketing. Un defecto de marketing significa que la empresa anunció un producto para un propósito para el cual claramente no es adecuado. Por ejemplo, un juguete que contiene piezas pequeñas y presenta un peligro de asfixia no debería anunciarse como adecuado para bebés o niños pequeños.
Posibles defensas en un caso de responsabilidad del producto
El tipo de defensa que utilizará un fabricante en una demanda por responsabilidad del producto depende de las circunstancias específicas del caso, pero hay varias defensas comunes que debe conocer si está buscando daños relacionados con un producto defectuoso.
- Las lesiones o daños del demandante no fueron causados por el producto. Para ganar una demanda por responsabilidad del producto, debe poder demostrar que sus daños fueron causados por el producto defectuoso. Si el fabricante puede poner en duda la causa de sus daños, esto puede evitar que la empresa sea considerada responsable financieramente.
- El demandante fue negligente. Este tipo de defensa afirma que el demandante usó el producto de una manera que no estaba prevista y que no podría haber sido razonablemente prevista por la empresa.
- El demandante asumió el riesgo. Una variación de la defensa de negligencia comparativa, esta defensa argumenta que el demandante sabía que el producto podía ser peligroso y eligió usarlo de todos modos.
- La garantía no se aplica. Esta defensa no se usa típicamente cuando un consumidor simplemente compró un producto en una tienda en lugar de directamente del fabricante, pero puede ser un problema cuando un demandante “renunció” a la garantía al aceptar en el momento de la compra que los términos de la garantía no se aplicaban.
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